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CA La aparición de un suspenso en las notas escolares suele causar malestar en las familias. Y si los suspensos son múltiples, se liberan todo tipo de emociones y reproches.
Lo primero es conocer las causas del suspenso
La primera pregunta que nos debemos hacer es: ¿Es el alumno el principal responsable de sus notas? En general, sí, aunque unas malas calificaciones también pueden ser debidas a factores externos que hay que conocer.
Si no hay ninguna causa externa, puede ser que:
- No ha trabajado ni se ha esforzado lo suficiente
- Su ritmo de aprendizaje es más lento
- Desmotivación y desgana
- Irresponsabilidad
- Dificultad de la materia
Para conocer la causa nada mejor que contactar con los profesores y los tutores, ya que nos pueden mostrar el fallo, así como indicarnos cómo ayudar al menor.
Es importante disponer de toda la información para ayudar a nuestr@s hij@s. Saber si son muy capaces o tienen dificultades; si son constantes o perezos@s; si muestran interés o tienen un mal comportamiento.
Las causas de suspenso generalmente se deben a su falta de estrategias para aprender y porque no ha adquirido aún un hábito que le permita aplicar sus habilidades.
NORMAS BÁSICAS PARA LAS FAMILIAS FRENTE A LOS SUSPENSOS
Para afrontar las asignaturas suspendidas, los especialistas recomiendan tener una actitud positiva:
- No hacer un drama del suspenso.
- No descalificar al niño, tampoco hay que juzgarle o compararle con otr@s niñ@s, lo que podría afectar a su autoestima. Igualmente, hay que evitar reproches hacia el profesor que ha puesto la nota de no aprobado al menor. Es el niñ@ que ha suspendido.
- Ayudarle a ser consciente de su proceso de aprendizaje y cómo puede cambiar su comportamiento.
- Encontrar las razones del suspenso, como pueden ser la organización, las rutinas o la complejidad del aprendizaje, entre otras.
- Fijar un horario para estudiar.
- Concretar un sitio para el estudio.
- Ofrecer herramientas y recursos para que tenga un método de estudio adecuado y útil. Buscar ayuda, en caso necesario.
- Crear un plan con objetivos realistas. Para ello se debe organizar el tiempo de estudio y también establecer lo que se va a trabajar para tener unas buenas expectativas
- L@s niñ@s y jóvenes necesitan que los escuchen, pero también que seamos francos, elocuentes y exigentes.
- Ser comprensivo y positivo. Animar y motivarlo para que se siente apoyado para superar este déficit en su aprendizaje reflejado en las notas.
Y si mi hijo repite curso ¿Qué debo hacer?
Lo más importante es que no lo veas, y tampoco lo manifiestes, como un fracaso. En este sentido, la doctora Luisa Mompó Marbotto, pediatra especialista en Salud Mental Infantil y Juvenil, explica que «muchos padres piensan que repetir es un estigma que los marcará toda su vida, y esto nunca hay que trasmitirlo».
X No hay que dramatizar la situación, porque en vez de solucionarla, la empeora.
✓ Debemos evitar que nuestr@ hij@ se sienta inferior a sus compañeros. “Si repite es porque no ha consolidado el nivel requerido y esto es lo que debe entender».
En caso de repetir curso, ¿cómo podemos apoyar a l@s niñ@s y l@s jóvenes?
Un consejo es modificar la actitud frente a los estudios, aplicando las siguientes pautas:
✓ Enseñar las técnicas y los hábitos para estudiar
✓ Ofrecerles el apoyo de profesionales
✓ Hablar más con l@s profesor@s del menor
La educación es un proceso a largo plazo, los resultados no se perciben en un clic. Por ello, es importante que l@s m/padres confíen en sus hij@s y en sus docentes.
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